Hace poco regalamos a unos amigos una cámara Instax y yo aproveché a complementarles el regalo con un álbum cosido mediante encuadernación japonesa.
La cámara es una monada y esta nueva versión trae unos colores preciosos.
Para el álbum opté por este papel de arbolitos en las tapas exteriores, y cartulinas negras para las hojas. En la primera les he escrito sus nombres con rotulador metálico (en la foto no se ve bien el efecto).
He optado por la encuadernación más sencillita, pero que al final es la que más me gusta.
El interior de las tapas lo he combinado con estas hojas de puntitos en los mismos tonos que los árboles.
Yo creo que a ellos les gustó el regalo. ¡Un toque artesano nunca puede faltar!
¡Hasta pronto!
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